BYD irrumpe en el segmento de las pick ups medianas con un modelo híbrido enchufable de 480 CV
Aunque BYD no es una marca conocida en Argentina más allá de la importación de algunos buses eléctricos, en China es una de las empresas más importantes y un referente indiscutible en electrificación. Sus productos ya se comercializan con gran aceptación en Uruguay y Brasil, y pronto se embarcarán en uno de los desafíos más difíciles: conquistar el segmento de las pick ups medianas.
Para ello, la marca está desarrollando su propia camioneta, de la que ya se han filtrado algunas fotos espía. Lo más interesante, además de su diseño, está bajo el capó: mientras otros fabricantes se lanzan tímidamente a la electrificación en esta categoría, BYD va por todo y ofrecerá una mecánica híbrida enchufable de **480 CV**, una potencia que supera incluso a algunas pick ups full size.
Según los rumores y algunos datos filtrados por la firma asiática, su mecánica combinará un motor naftero de 1,5 litros con alrededor de 183 CV con dos motores eléctricos para entregar los mencionados 480 CV. Este mismo sistema es utilizado por el BYD Leopard 5, un SUV que alcanza los 687 CV.
La batería, aunque no ha sido confirmada oficialmente, tendría una capacidad de 31,8 kWh, mientras que la plataforma será la DMO, un chasis de largueros que también utiliza el SUV, con las celdas de las baterías situadas en el centro del mismo y suspensiones independientes en ambos ejes.
Estéticamente, las fotos que se conocen hasta ahora de la pick up anticipan un diseño que busca transmitir robustez y agresividad, con trazos rectos bien marcados y formas cuadradas, pero también con un detalle particular: el evidente parecido con la Ford F-150 en el sector frontal, especialmente por el diseño de los faros y la firma luminosa en forma de C. También el remate posterior es muy similar al de la pick up de la Serie F de Ford, una estrategia habitual entre las firmas asiáticas de imitar a los productos occidentales. El resultado es un aspecto que impone presencia y parece una “mini F-150”, incluso más que una Ranger.
Donde tiene identidad propia es en el interior, donde el protagonismo se lo llevan las dos enormes pantallas que se destacan sobre el salpicadero. Una de 10,25 pulgadas para el cuadro de instrumentos y otra de 15,6 pulgadas para el sistema multimedia. Debajo se encuentran las salidas de aire y una serie de botones para la transmisión y otras funciones del vehículo, todo ello con un estilo muy robusto y un aire norteamericano.
Su presentación está prevista para finales de abril durante el Salón de Pekín, y su llegada al mercado brasileño está prevista para el segundo semestre. Por el momento, la marca no tiene un representante directo en Argentina.