Mercedes-Benz presentó el C63 AMG, la variante más deportiva del Clase C. Muestra importantes cambios a nivel estético, y se pueden apreciar suspensiones rebajadas, llantas de aleación de 18 pulgadas y paragolpes especiales, el logotipo de la preparadora alemana y un alerón de pequeñas dimensiones.Viene con un motor con ocho cilindros de 6,2 litros y 457 CV, lo que significa más potencia que el Audi RS4 y el BMW M3, su rivales directos. Con una caja de cambios automática de siete marchas, tiene una velocidad final de 250 km/h, limitada electrónicamente, y una aceleración de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos.
La transmisión, que es una adaptación de la 7G Tronic, con mandos en el volante, tendrá tres programas de funcionamiento: Sport, Confort y Manual. En la variante Sport los cambios de marchas son un 30 por ciento más rápidos que en la opción Confort, en cambio, en Manual son un 50 por ciento más rápidos todavía.
Por su parte, el control de estabilidad trae un programa adicional que permite tres opciones. La primera es el ESP ON, que es el modo normal del sistema como en cualquier otro auto. Después está el ESP Sport que permite cierto grado de sobreviraje. Por último, el ESP OFF que anula todas las funciones del sistema original. En los dos últimos casos si el conductor pisa el freno se vuelve automáticamente al modo ESP ON.
En el interior se destacan las butacas con apoyacabezas integrados, los tapizados símil cuero, el volante más pequeño que en la versión normal (36,5 centímetros de diámetro), diversos insertos metálicos y pedalera deportiva de aluminio.